Georgina Elustondo
Dos nuevos casos, uno en el conurbano y otro en Capital, engrosan las estadísticas de meningitis en Argentina. Pero tanto los médicos infectólogos como las autoridades sanitarias de ambas jurisdicciones y de Nación subrayan que no se puede hablar de brotes ni de epidemia, que el número de casos es muy inferior al del mismo período de 2006 y que no hay ninguna razón hasta el momento para entrar en pánico o suponer que la población está ante un riesgo mayor que el habitual en cada temporada otoñal, cuando esta enfermedad acelera sus picos de incidencia.
Los dos nuevos casos "no están conectados", por lo cual las distintas carteras sanitarias destacan que no se puede hablar de brote: uno es de provincia de Buenos Aires, un nene de 4 años que asiste a un colegio de Vicente López. Tiene una meningitis viral y anoche evolucionaba bien (ver "Leandro...).
El otro caso es una mujer de 30 años que trabaja en una escuela pública de Capital. Está internada, en estado grave, a causa de una meningitis bacteriana que derivó en una meningococcemia, una infección generalizada (ver Internada...).
Tanto en la Ciudad como en la Provincia el número de casos es considerablemente inferior al registrado a la fecha el año pasado: en Capital suman 45 (el año pasado eran 81) y en Provincia, 201 (cuando en 2006, para esta misma fecha, se registraban 379). Lo que sí aumentó es la letalidad en Provincia, de 7 a 9 personas comparando ambos períodos.
"Nos preocupa que se esté generando un miedo desproporcionado e injustificado en la población. Una cosa es estar atentos y tomar precauciones y otra entrar en pánico: no hay motivos y no hay nada que se esté ocultando. El año pasado a esta altura teníamos el doble de casos", asegura el doctor Jorge San Juan, reconocido infectólogo y jefe de la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Muñiz.
La misma tranquilidad intenta llevar el doctor Sergio Trodiano, director de Medicina Preventiva de la Provincia. "Estamos en los niveles habituales a esta altura del año. Lo fundamental es ir al médico ante cualquier síntoma, no automedicarse ni subestimar signos", subrayó.
Los especialistas explican que hay varios tipos de meningitis: las más frecuentes en Argentina son las virales (que en general son benignas y se autolimitan) y las bacterianas, que son más peligrosas y pueden resultar fatales. A estas últimas las pueden provocar diferentes gérmenes: el neumococo (que no es contagioso: resulta de una infección cercana al cerebro, como otitis media o sinusitis), el hemofilus B (casi erradicado gracias a la BCG) y el meningococo, que puede transmitirse de boca a boca, "aunque es raro porque el germen muere en el medio ambiente, no queda en la mesa ni en el pizarrón, y deben darse varios factores para que haya contagio".
La nena que murió la semana pasada, la que iba al colegio Jesús María, tenía meningitis por neumococo, "fruto de una infección a nivel sinusal", aclara San Juan. El caso del nene de Lanús sí era por meningococo, al igual que la joven internada en el Muñiz.